¿Por qué manejamos rápido?
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Un buen amigo me informó que el promedio de horas que pasamos al día sobre nuestro vehículo son 4, es mucho tiempo.
Todos odiamos los topes pero todos somos responsables de su existencia por el simple hecho de no respetar los límites de velocidad y los derechos de vía.
Sin temor a equivocarme, el tope es el monumento a la incivilidad por excelencia. Suena agresivo e incluso ofensivo; pero es la verdad. En México somos seguramente el país con más de estos monumentos, felicidades, los fabricantes de amortiguadores, llantas y rines están muy agradecidos por nuestros malos hábitos de manejo.
Dejando atrás los comentarios amargos pregunto:, ¿por qué manejamos más rápido de lo necesario? Sin duda alguna todos los días varias personas enfrentan situaciones de emergencia que los obligan a pisar el acelerador más fuerte de lo habitual; pero que los niños vayan a llegar tarde a la escuela no califica como situación de emergencia. En México no tenemos datos que nos permitan saber la razón de cada accidente automovilístico; pero seguramente el común denominador es la imprudencia.
Para todos es evidente el crecimiento que ha tenido el País en parque vehicular y el rezago en las vialidades. La mayoría de las grandes obras viales en México tienen cuando menos 25 años de rezago, es decir, el beneficio que puede tener hoy el segundo piso del periférico de la Ciudad de México no es suficiente para resolver el problema del tráfico en dicha ciudad. 
Las vías “rápidas” en nuestras ciudades son muy relativas, los esfuerzos de las policías de tránsito son muy intermitentes y tristemente todos sabemos la mala reputación que la policía de tránsito tiene y no quiero generalizar, hay muchos oficiales, afortunadamente la mayoría, que desde ya se merecen un monumento por su servicio.
Te lo pedimos por favor, de la forma que prefieras, MANEJA CON CUIDADO, respeta los límites de velocidad y si es necesario levántate más temprano, sal unos minutos antes de tu casa u oficina. Tu día será más placentero y tu hígado y también tu vehículo te lo van a agradecer. Hay otras razones por las que está “justificado” estresarse, manejar imprudentemente no. No te haces menos hombre porque te rebasen, está científicamente comprobado. 
